¿Es segura para el corazón una dieta cetogénica?

El Dr. Stephen Phinney y el equipo de Virta

‍Enel contexto de una dieta cetogénica bien formulada (alta en grasas, baja en carbohidratos, moderada en proteínas), la ingesta de grasas no sólo es segura, sino imprescindible para el éxito a largo plazo. Se han realizado múltiples estudios sobre dietas cetogénicas y bajas en carbohidratos de hasta tres años de duración, sin que se haya producido un aumento de los eventos cardíacos ni de la mortalidad (Halton, 2006). Además, los factores de riesgo cardíaco mejoran, con disminución de triglicéridos, mejora de la presión arterial, mejora del control glucémico y aumento de HDL (Dashti, 2004; Hu, 2014; Nordmann, 2006; Feinman, 2015; Mirza, 2009). Curiosamente, el mayor ensayo jamás realizado sobre dietas bajas en grasa, la Iniciativa de Salud de la Mujer, no mostró ninguna disminución en los eventos de enfermedades del corazón o la mortalidad (Howard, 2006). Los estudios controlados han fracasado sistemáticamente en mostrar una asociación clínica entre el consumo elevado de grasas saturadas y los resultados cardiovasculares adversos (Siri-Tarino, 2010).

La ciencia sobre el colesterol y las grasas saturadas ha evolucionado mucho en las últimas décadas. Ahora se acepta que el colesterol dietético no aumenta el colesterol en sangre, y esto se ha reconocido incluso en las nuevas directrices dietéticas. Numerosos metaanálisis de gran tamaño han demostrado que no existe ninguna relación entre la ingesta de grasas saturadas y los episodios cardiovasculares o el aumento de la mortalidad. Tanto estudios anteriores como nuestra investigación han demostrado que, paradójicamente, en el marco de una dieta cetogénica, una mayor ingesta dietética de grasas saturadas en realidad disminuye la grasa saturada en suero (Forsythe, 2008). La hipótesis es que esto se debe al uso preferente de las grasas saturadas de la dieta como combustible en el estado cetoadaptado.

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‍Citaciones:

Feinman RD, Pogozelski WK, Astrup A, Bernstein RK, Fine EJ, Westman EC, Accurso A, Frassetto L, Gower BA, McFarlane SI, Nielsen JV, Krarup T, Saslow L, Roth KS, Vernon MC, Volek JS, Wilshire GB, Dahlqvist A, Sundberg R, Childers A, Morrison K, Manninen AH, Dashti HM, Wood RJ, Wortman J, Worm N. Restricción de hidratos de carbono en la dieta como primer enfoque en el tratamiento de la diabetes: revisión crítica y base empírica. Nutrition. 2015 Jan;31(1):1-13. doi:10.1016/j.nut.2014.06.011. Epub 2014 jul 16. Revisión. PubMed PMID: 25287761.

Dashti HM, Mathew TC, Hussein T, Asfar SK, Behbahani A, Khoursheed MA, Al-Sayer HM, Bo-Abbas YY, Al-Zaid NS. Efectos a largo plazo de una dieta cetogénica en pacientes obesos. Exp Clin Cardiol. 2004 Fall;9(3):200-5. PubMed PMID: 19641727; PubMed Central PMCID: PMC2716748.

Halton TL, Willett WC, Liu S, Manson JE, Albert CM, Rexrode K, Hu FB. Low-carbohydrate-diet score and the risk of coronary heart disease in women. N Engl J Med. 2006 Nov 9;355(19):1991-2002. PubMed PMID: 17093250.

Hu T, Bazzano LA. La dieta baja en carbohidratos y los factores de riesgo cardiovascular: evidencia de estudios epidemiológicos. Nutr Metab Cardiovasc Dis. 2014 Abr;24(4):337-43. doi: 10.1016/j.numecd.2013.12.008. Epub 2014 Ene 2. Revisión.PubMed PMID: 24613757; PubMed Central PMCID: PMC4351995.

Mirza N, Marson AG, Pirmohamed M. Effect of topiramate on acid-base balance: extent, mechanism and effects. Br J Clin Pharmacol. 2009 Nov;68(5):655-61. doi: 10.1111/j.1365-2125.2009.03521.x. PubMed PMID: 19916989; PubMed Central PMCID: PMC2791971.

Nordmann AJ, Nordmann A, Briel M, Keller U, Yancy WS Jr, Brehm BJ, Bucher HC. Effects of low-carbohydrate vs low-fat diets on weight loss and cardiovascular risk factors: a meta-analysis of randomized controlled trials. Arch Intern Med. 2006 Feb 13;166(3):285-93. Revisión. Fe de erratas en: Arch Intern Med. 2006 Abr 24;166(8):932. PubMed PMID: 16476868.

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